MEMORIA PARTIDO
Se cree que los juegos que utilizan naipes se originaron en China ya en el siglo VI d.C. Con el advenimiento de la impresión en bloques de madera en el siglo IX d.C., fue posible crear fácilmente barajas de cartas, haciéndolas más disponibles y populares. Los historiadores creen que las tarjetas en algún momento podrÃan haber representado moneda, donde el dinero de juego sustituyó al dinero real en los juegos de azar.
1 CONFIGURAR
Para jugar a este juego necesitas un juego de cartas. Una baraja de cartas consta de varias fichas de papel que suelen ser idénticas en tamaño y forma y tienen dos lados: el anverso y el reverso.
Para este juego, puedes usar cartas estándar o juegos con imágenes. ¡Utilice nuestra plantilla para crear una baraja de cartas claramente suya! Un juego de cartas puede sumar desde diez pares para principiantes hasta un juego de dos barajas (52 cartas) para un mayor desafío.
2 JUEGOS
• Reúna o haga su mazo de cartas.
• Ponga todas sus cartas boca abajo, mézclelas y colóquelas en filas y columnas ordenadas.
• El jugador más viejo va primero y voltea dos cartas. Si las cartas coinciden, el jugador reclama las dos cartas, las retira y vuelve a dar la vuelta a dos cartas.
• Si las dos cartas volteadas no coinciden, las cartas se voltean y es el turno de la siguiente persona.
• El desafÃo es prestar atención a las cartas que se revelan y recordar dónde están ubicadas para que pueda emparejarlas y reclamarlas cuando sea su turno.
• Cada jugador toma un turno para lanzar dos cartas hasta que todas las cartas se emparejan y reclaman.
• Una vez que todas las cartas están emparejadas y reclamadas, la persona con más cartas gana.
Este juego se puede jugar como solitario con un solo jugador. En este caso, el jugador rastrea el número de pares no coincidentes que se dan la vuelta e intenta obtener la menor cantidad posible de giros para que coincidan con todos los conjuntos.